6 de febrero de 2007

El vicio


Es tan difícil dejar el Glamour...

4 de febrero de 2007

Mono/color



Bueno, debo admitir que estoy un poco algarete. Desde el nacimiento de este blog es poco lo que he posteado, pero qué le voy hacer, después de todo esto es un espacio para hacer lo que se me antoja, o no?
Quién más está ahí? Ahí, detrás de la puerta. Un momento, por favor. Esto de vivir con los viejos es una situación complicada, la quejadera, yo siempre estoy con la quejadera.
La semana pasada regresé a un bar santurcino donde suelo ir con aquellos que me hacen pensar, reír y encojonarme: mis amigos.
El puente que me conecta con la calle que conduce a dicho bar ya estaba azul, jodío Santini. ¿Qué mirar ahora, mientras busco parking?
En mi última visita divisé nuevas piezas. Aquel espacio invitaba a mirar, a adentrarse en la ciudad, a tomarlo con calma mientras buscaba el parking, porque siempre es "el parking" lo que me encrispa la piel y hace que vibre de ira mi telaraña.
Con aquellas piezas a fuerza de spray de colores podía dar siete vueltas en busca del espacio para mi carro y nada. Ni coraje, ni llamadas de emergencia: "me voy, esto está apretao (como diría el Gabo)".
El graffiti hablaba debajo de aquel puente. Había ruido, color, olores, movimiento. No se podía ser indiferente ante ese combate de colores que ayudaba a alargar la vida dentro del vehículo.
Pero ahora: monocromático.
La estética? Claro, hay que mantener limpia la ciudad.
La ciudad? Claro, eso es vandalismo.
Vandalismo? Tras casi media hora, trepé el carro en la acera.